Y dios ¿para qué sirve?

Jean Seas Acosta (*)
jseas_16@hotmail.com

Gran parte de la reflexión teológica en Occidente ha tratado de responder a esta crucial pregunta. Evidentemente las respuestas son muchas y muy variadas, dependientes todas de un posicionamiento en torno al concepto de dios. Hay quienes desde la fe religiosa sostienen un propósito divino para el ser humano en el mundo, e inclusive fuera de él. Desde el teísmo dios es visto únicamente como principio explicativo de la naturaleza. Para otros, desde el ateísmo, dios es objeto de crítica destructiva, por no manifestarse objetivamente. Sin embargo, todas ellas tienen algo en común, por muy contrarias y distantes que sean.

Históricamente se ha pensado a dios bajo un criterio de razón instrumental. Esto quiere decir que en el grueso de reflexiones teológicas, confesionales o no, dios tiene que servirle para algo al ser humano, porque sino, pensar a dios es una verdadera pérdida de tiempo.

Pero, ¿Y si no fuera así? Si dios, por tener una condición distinta a la humanidad, no tenga necesidad de pensarnos, y por lo tanto no se obligue a servirnos para algo. La interrogante no es del todo herética, el Evangelio de Marcos (IX, 24) apunta a que la fe sin la duda, es fe muerta. Un teólogo suizo de la primera mitad del siglo XX, decía que la humanidad siempre ha pensado a un no-dios. Principalmente los teólogos han puesto en "boca" de dios, cosas que no podrían haber salido nunca de él. Por su parte, Cioran escribe que los teólogos únicamente han conservado la mayúscula del vocablo dios; las demás letras que componen el vocablo han sido prostituidas. Hoy no solamente los teólogos hacen eso, sino también el creyente religioso común. Ese que preside puestos de poder en el gobierno, aquel que se ha capacitado para educar a las generaciones, el tutor legal de un niño, el adulto mayor abandonado en un hospital, etc.

Es posible determinar en nuestras latitudes este tipo de preocupaciones racionales instrumentalistas por parte de quienes piensan o pensaron la divinidad. La corriente liberadora de la teología latinoamericana, en los años setenta, trató de bajar de los cielos al Cristo y hacerlo partícipe de la opresión de los empobrecidos. Resultando un dios-Cristo que libera de la opresión en la historia. Un dios que oye el lamento del pobre y del excluido social.

Pero, no conformes con ello, otros grupos cristianizados vieron en la idea liberadora de dios la catapulta para resolver todos sus problemas inmediatos. Naciendo así una multitud de dioses discursivos que escuchan el lamento de los afrodescendientes, de los homosexuales, de las mujeres, etc. Bajo la idea de respeto hacia un dios personal, el ecumenismo se disfraza de politeísmo; que a la postre legitimaría cualquier "voluntad divina". Desde este punto de vista, cualquier interés humano quedaría justificado por la voluntad de dios, de un dios que adquiere dimensiones personales.

Y el problema real, no es que dios escuche el sufrimiento del afrodescendiente y del pobre, sino también legitimar la escucha, por parte de dios, de una plegaria que provenga de un asesino, un político corrupto, un fundamentalista homofóbico, un xenófobo, un misógino, un terrorista, etc.

Si el nombre de dios sirve para algo, definitivamente no puede ser para legitimar los deseos humanos. Deseos que son situados, egoístas, individuales e instrumentales. Si la humanidad ha considerado al dios como el ser más supremo entre todos, debería de cuidarse de no manchar la bondad que se encierra en esa idea. Pensar al dios, es pensar un otro diferente; una alteridad que se puede reconocer en cada relación humana.

(*) Estudiante de Teología. Escuela Ecuménica en ciencias de la Religión. Universidad Nacional de Costa Rica.

  • CAMPUS Digital

    Agosto 2018 - Año XXXI N° 300

    Oficina de Comunicación, Universidad Nacional. Apartado 86-3000, Heredia - Costa Rica. Teléfonos (506) 2237-5929 y 2277-3224, FAX: (506) 2237-5929. Correo electrónico: campus@una.ac.cr Edición digital: www.campus.una.ac.cr

  • Directora: Maribelle Quirós Jara.
    Editor: Víctor J. Barrantes C.
    Periodistas: Víctor J. Barrantes C., Gerardo Zamora Bolaños, Silvia Monturiol Fernández, Johnny Núnez Zúñiga, Laura Ortiz Cubero, Maribelle Quirós Jara,
    Asistente editorial:
    Andrea Hernández Bolaños y Ana Lucía Vargas.
    Diseño de página: José Luis Sánchez Pino josesanchez@engineer.com

  • © Prohibido reproducir, transmitir o distribuir parcial o totalmente los artículos, fotografías, diseño o cualquier otro elemento del contenido que aparece en CAMPUS Digital. Si desea hacerlo enviénos su solicitud a campus@una.cr