Insectos delatores

Científicos con singular método para detectar calidad del agua.
Biólogos de la UNA hacen de insectos acuáticos sus aliados.
Datos claves para ordenamiento territorial y protección del agua.

Gerardo Zamora Bolaños / CAMPUS
gzamorab@una.cr

  Tal vez usted las ha visto volando en quebradas o ríos. Quizás las haya espantado. Son las efímeras, insectos acuáticos capaces de revelar la calidad del agua donde habitan, y que más tarde podríamos beber. Las repercusiones de estudiarlas podrían ir desde el ordenamiento territorial y la planificación de actividades económicas, hasta la protección del agua para consumo humano. El Laboratorio de Entomología de la Escuela de Ciencias Biológicas de la Universidad Nacional (Leuna) abre sus puertas para mostrarnos los secretos de una singular metodología.

“Hogares” reveladores

  Para decirlo en términos coloquiales, los insectos acuáticos, las llamadas efímeras en este caso, tienen sus “gustos” a la hora de elegir su hábitat. No escogen cualquier cuerpo de agua, sus “preferencias” pueden revelar la calidad del preciado líquido: “hay más de 3 mil especies de efímeras; se ha concluido que hay algunas que sólo habitan aguas con determinadas características, por ejemplo aguas de muy buena calidad, otras son capaces de vivir en aguas con contaminantes derivados de múltiples fuentes, como productos químicos, pesticidas, fertilizantes, desechos industriales y domésticos. De tal forma, su presencia delata qué tipo de agua tenemos allí: así las efímeras se convierten para nosotros en bioindicadores”, explica Meyer Guevara, académico de la UNA.

  Desde hace varios años el país cuenta con un inventario, en el que se asocian determinadas especies de efímeras con ciertas características acuáticas. Desde el 2010, investigadores, académicos y estudiantes de la Escuela de Ciencias Biológicas de la UNA, trabajan en ampliar y detallar aún más esa lista, en el marco del proyecto Ecología de Efímeras de Costa Rica: “bajo el liderazgo del profesor investigador, el entomólogo Carlos Esquivel, mi persona y un importante grupo de estudiantes de esta escuela, estamos mejorando la precisión del método de bioindicación ya establecido en el Reglamento para la Evaluación y Clasificación de la Calidad de Cuerpos de Agua Superficiales. Actualmente estamos ampliando el conocimiento acerca de la presencia de las diferentes especies de efímeras y su relación con la calidad del agua. Se trata de una metodología económicamente viable en comparación con otras, y mucho más reveladora, debido a que el insecto acuático vive permanentemente en el río; por lo tanto, la lectura que se hace de él es más minuciosa, mientras que los muestreos químicos constituyen sólo una fotografía del momento. Ambos métodos son complementarios y vienen a mejorar nuestras decisiones sobre la gestión de los recursos hídricos”, agregó Guevara, quién también coordina el mencionado proyecto.

Manos al agua

  Botas, bloqueador, gorra y equipo especializado. El resto es mística y profesionalismo. Al amanecer de cualquier día, un grupo de estudiantes e investigadores de la UNA llegan a una quebrada de San Isidro de Heredia. Durante la mañana hacen varias observaciones, anotan en sus libretas, y recolectan algunas especies de efímeras: “el trabajo de campo es muy interesante. Con la ayuda de pequeñas redes colectamos los insectos, que luego se preservarán en alcohol para su análisis en laboratorio. Los clasificamos hasta el nivel de especie, y elaboramos una descripción detallada de su hábitat. Esto nos permite establecer las relaciones insecto-calidad del agua”, advierte Guevara.

  Los usos de la información disponible pueden ir desde la planificación de actividades económicas, hasta la protección del agua para consumo humano y el estudio de los efectos del cambio climático. “Para los entes rectores en materia de agua y salud, municipalidades, ministerios por ejemplo, estos datos son vitales, pues apoyan el diseño de sus políticas en función de la calidad y el tipo de agua presente en una determinada zona. Recordemos que las nacientes y mantos acuíferos, de las cuales depende el consumo de agua potable, tienen directa relación con las aguas superficiales, como ríos, quebradas, siendo estos el hábitat de las efímeras”, concluyó Guevara.

  Los responsables del proyecto esperan pronto compartir la información que progresivamente se obtiene, con las entidades del Estado encargadas de velar por la conservación el recurso hídrico y el crecimiento urbano.

Efímeras: insectos de vida corta

Las efímeras constituyen un grupo taxonómico de insectos delicados que pasa la mayor parte de su tiempo en estado de ninfa (inmaduros). Durante este periodo, se alimentan principalmente de microalgas y material particulado fino disponible en los cuerpos de agua; sin embargo, en estado adulto carecen de estructuras bucales funcionales, por lo cual sobreviven poco tiempo, y este es empleado en la reproducción.

Fuentes. Domínguez y otros (2006). Ephemeroptera of South America;

Flowers y De la Rosa (2010). Ephemeroptera.

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    Febrero 2018 - Año XXVIII N° 294

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