No a la pesca de arrastre de camarón
Gerardo Zamora Bolaños / CAMPUS
gzamorab@una.cr
Un verdadero polvorín protagonizan camaroneros y ambientalistas desde noviembre anterior, cuando el Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (Incopesca) decidió reactivar la pesca de arrastre de camarón, prohibida desde el 2013. Incopesca lo permitiría, siempre y cuando los operadores cumplan con ciertos parámetros de responsabilidad ambiental, dice ese instituto. En el 2013, un fallo de la Sala Cuarta había confirmado los daños ecológicos que esta práctica generaba.
La reacción de la Escuela de Ciencias Biológicas de la Universidad Nacional (UNA) no se ha hecho esperar. Una y otra vez se ha manifestado en contra de la reapertura de la pesca de arrastre de camarón, ya que para sus representantes, a la fecha no existe ningún documento que compruebe que dicha técnica de pesca sea sostenible para los recursos marinos: “algunas de nuestras investigaciones sobre pesca de camarón en Costa Rica, han permitido evidenciar el efecto negativo que causan las redes arrastreras no solo sobre los fondos marinos (destruyen pastos marinos, algas, arrecifes coralinos, entre otros); sino que también sobre las poblaciones de peces, moluscos y otros crustáceos (tanto de importancia comercial como otros de gran valor ecológico), pues al ser un arte de pesca nada selectivo, captura juveniles de todos estos grupos; por ejemplo corvinas, pargos, róbalos, sardinas, almejas, caracoles, cangrejos, langostas, calamares, pepinos y estrellas de mar”, reza un comunicado de prensa emitido recientemente por dicha escuela.
Según especialistas de la Escuela de Ciencias Biológicas de la UNA, en el 2013 se logró evidenciar que todas las poblaciones de camarón en el Pacífico costarricense se encuentran en estado de sobreexplotación. A consecuencia de ellos, actualmente se capturen en su mayoría camarones juveniles, lo cual es contraproducente para el mantenimiento del mismo recurso.
Ahora la palabra la tienen los magistrados de la Sala Cuarta, quienes ya tiene en sus manos cuatro recursos de amparo, interpuestos por grupos ambientalistas en contra del acuerdo del Incopesca de reactivar la pesca de arrastre de camarón.
Desde principios de los años 80, la Escuela de Ciencias Biológicas de la UNA ha desarrollado investigaciones dirigidas hacia los recursos marino costeros, principalmente sobre las especies de mayor valor comercial, lo que ha permitido contar con el conocimiento científico y técnico sobre el estado de estas poblaciones.