Retos para el Nuevo Gobierno
Política pública y servicios ambientales
Mary Luz Moreno Díaz (*)
mary.moreno.diaz@una.cr
El nuevo gobierno tendrá desafíos en todos los campos, que deberían conllevar al fortalecimiento de aquellos aspectos positivos y la toma de medidas para mejorar aquellos que no están funcionando. En el área de políticas públicas para la gestión de los recursos naturales y servicios ambientales quedan varias oficializadas como la Política Nacional de Humedales, la Política Nacional de Biodiversidad y la Política Nacional para el pago por Servicios Ambientales entre otras, que serán desarrolladas casi en su totalidad por el nuevo gobierno. Estas políticas han sido forjadas con conocimiento adquirido de diversos esfuerzos que se han realizado en los últimos años, algunos de los cuales han tenido que ser revisados y cambiados ante duras evaluaciones del ente contralor.
Un gran logro de cualquier gobierno sería que al finalizar el periodo de ejecución de cada una de las políticas se hayan realizado varias evaluaciones parciales, los ajustes necesarios y se tenga una evaluación final que permita analizar el cumplimiento y ojalá el impacto de dichas políticas. Algunos aspectos que se deberían tener en cuenta para llegar a este objetivo son:
En primer lugar, cualquiera que sea el partido que quede en el poder, tener el compromiso de desarrollar las políticas que se han generado en la presente administración en las que se han invertido recursos humanos y financieros valiosos y que garantizarán la gestión adecuada de recursos, algunos de los cuales son vitales, como el recurso hídrico y la biodiversidad, que ya muestran señales de deterioro.
En segundo lugar, realizar una revisión crítica y analizar si con los elementos contenidos en estas políticas va a ser posible su implementación y realizar evaluaciones parciales y finales. Algunos de estos elementos son: la existencia de línea base, la existencia de indicadores, la especificación de los ejecutores de cada uno de los lineamientos y los presupuestos. Otro aspecto importante es la determinación del actor que se encargará de sistematizar y dar seguimiento al cumplimiento de la política.
En tercer lugar, la identificación de otros actores que, aunque no están incluidos en la formulación de la política, sí son claves para su cumplimiento, como es el caso de las universidades que no sólo son una fuente de información científica e investigativa valiosa sino que permiten dar seguimiento continuo a procesos e indicadores que no es posible de realizar cuando se contratan consultorías con productos puntuales que pueden quedar archivados sin uso adecuado.
La evaluación de las políticas públicas no sólo se debe realizar para mejorar aquellos aspectos que no están siendo implementados adecuadamente sino que además permite una gestión de recursos públicos humanos y monetarios que se destinan para desarrollar dicha política.
(*) Académica Cinpe-UNA