UNA huella en cultura
La Compañía de Cámara Danza UNA, la dramaturgista Anabelle Contreras Castro y el compositor Sergio Fuentes Acosta, fueron galardonados con los Premios Nacionales de Cultura 2013.Laura Ortiz C./ Silvia Monturiol F/ CAMPUS
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El pasado jueves 27 de febrero, el Teatro de la Danza del Centro Nacional de Cultura, fue el escenario en que se anunciaron las personas y agrupaciones ganadoras de los Premios Nacionales de Cultura 2013, máximos galardones para las artes y la producción cultural de Costa Rica que otorga el Ministerio de Cultura y Juventud. La lista fue publicada por el periódico La Nación.
Tres de los premios se otorgaron a académicos y estudiantes de la Universidad Nacional (UNA).
Signos sociales transformados en música
Si bien el premio es por composición musical, Sergio lo percibe también como un reconocimiento por el trabajo que realiza para su tesis de licenciatura –que está por concluir–, el cual se enfoca en el aporte social del colectivo de compositores de música experimental en el país.
Y es que a través de las producciones realizadas como parte del proyecto de música electroacústica Wiesengrund, este joven artista saca del escondite esas cosas que la sociedad prefiere ignorar para mantener el statu quo. Grabaciones de manifestaciones populares, o incluso discursos políticos, se combinan con la música para exponer ante el escucha signos sociales como la disconformidad de diversos sectores de la población con políticas gubernamentales, así como el reclamo de grupos minoritarios ante la discriminación y la exclusión.
Así lo refleja el veredicto del jurado del premio Aquileo J. Echeverría, que destaca al joven creador como “una persona comprometida con temas sociales” y a su proyecto como “accesible y gratuito, divulgado de manera amigable a través de la red”.
Fuentes cuenta con cuatro discos: Fracciones, Sombras breves, Humano ha muerto y Spectrogram, en los cuales ha corrido por su cuenta todo el trabajo desde la composición y la producción, hasta la socialización de estas creaciones por medio de la Internet.
Los embrujos de la modernidad costarricense
“Anabelle recupera la dramática historia de la transformación de Virginia Meza en fenómeno público, figura mediática, hipermujer. Junto con los escritos sobre Soralla, ofrece una lectura fina y perspicaz de este personaje como un caso extraordinario de creatividad y valentía”, cita el texto de presentación.
“Este es un reconocimiento al trabajo realizado; mi interés siempre ha sido aportar al debate nacional y en el cómo se formaron las figuras emblemáticas del país”, comentó Contreras.
La académica tiene una Maestría en Estudios Latinoamericanos y Antropología Cultural y doctorado en estudios Latinoamericanos en la Freie Universitaet Berlín, Alemania. Ha laborado como docente en la Escuela de Estudios Generales de la Universidad de Costa Rica y en el Instituto de Estudios Latinoamericanos y la Escuela de Arte Escénico de la UNA. Actualmente, dirige el programa del Doctorado Interdisciplinario de Letras y Artes de América Central de la UNA y trabaja como dramaturgista para el Teatro Abya Yala.
Premio a la madurez y la innovacion
“Estamos muy contentos porque es un reconocimiento al trabajo de los bailarines y las gestiones que hemos realizado de invitar maestros internacionales que nos ayuden a presentar una mayor diversidad de lenguajes y propuestas. Nuestra labor de difusión viaja a muchos rincones de nuestro país y seguiremos trabajando para que nuestra labor de extensión llegue a muchas otras comunidades”, detalló Virginia Cortés, directora artística.
La Compañía de Cámara Danza UNA se fundó en 1981 como un espacio abierto a la investigación y producción coreográfica, para fomentar el desarrollo profesional de bailarines, maestros y coreógrafos nacionales; además, ha conformado un repertorio coreográfico cuyas temáticas se refieren al ser humano y sus conflictos individuales y sociales.
En el ámbito internacional, esta agrupación artística ha participado en eventos dancísticos en diferentes países, como Ecuador, Estados Unidos, Inglaterra, México, República Dominicana, Venezuela y países de la región centroamericana.
Esa agrupación tiene siete bailarines. Durante el año pasado, presentó Arrayan, de Eric Hadman, En partes, de Mónica Runde y Silencio, de Mark Sieczkarek.