Veterinaria adquiere desfibrilador cardiaco
Por espacio de dos horas, los funcionarios del área médica de la empresa CICADEX explicaron a los integrantes del comité de emergencias de la Escuela de Medicina Veterinaria el uso adecuado de este moderno equipo, el cual debe ubicarse en un sitio accesible pues ante un síncope cardiaco los primeros cinco minutos son decisivos para salvar la vida de la víctima y evitar daños cerebrales. En casos como este, el uso de un Desfibrilador Externo Automático reduce el tiempo de respuesta y ayuda a la reanimación efectiva y rápida de la persona.
Según los expertos de CICADEX, una fibrilación ventricular se presenta cuando el corazón pierde su ritmo normal y por ende la capacidad de bombear y oxigenar sangre. Destacaron que cada minuto que se pierde en la atención de estas emergencias es un 10% menos de posibilidades de superar la situación.
“Cuando una persona se desmaya se debe llevar el equipo a la escena, porque se desconoce lo que está sucediendo en el cuerpo del paciente, sea una deshidratación, golpe de calor, falta de alimento, una patología personal o paro cardiaco. Una vez colocado el aparato en el cuerpo, el equipo diagnostica lo que sucedió y sí debe enviar o no descargas eléctricas al músculo cardiaco”, detallaron.