Región Brunca y rezago
José Luis Díaz Naranjo (*)jose.diaz.naranjo@una.cr
En segundo término, muchas técnicas usadas por los pioneros, países con índices definidos bajo el precepto de primer mundo, han sido descartadas, por tanto no se encuentran disponibles para que las economías atrasadas puedan seguir este derrotero y así llegar al preciado estadio. Lo anterior supondría la obligatoriedad del tránsito por las mismas etapas de los países desarrollados, como medio para lograr sus índices productivos. La pregunta inmediata: ¿es deseable que las economías atrasadas asuman los principios seguidos hacia la avanzada del progreso material alcanzado por los países del primer mundo, incluyendo su tecnología? De esta manera llegamos a la reducción del concepto de desarrollo a los parámetros establecidos por la sociedad occidental, con la determinación, como última instancia, al concepto de formación de capital y como consecuencia lógica, la sustitución de la idea de desarrollo por la de crecimiento económico, caso de la Región Brunca.
Sirvan las líneas que anteceden para presentar la situación actual en este espacio geográfico, que a pesar de su inserción en el mundo del mercado y las propuestas de desarrollo de proyectos de alto calaje (Diquis, aeropuerto, mercado regional, área económica especial, entre otros) sigue manteniendo condiciones de rezago social, económico y cultural.
Así, algunas características que prevalecen, según datos recientes, tienen que ver con indicadores de pobreza en aumento, con respecto a la población total: un 33,7% en el 2013, con respecto a un 36,2% en el 2014, este último indicador desagregado en un 11,6% de población en pobreza extrema, todos los habitantes que no pueden llegar al nivel mínimo de satisfacción de necesidades.
También, es recurrente la disminución de población trabajadora, abandono de la región como consecuencia de la ausencia de fuentes de empleo, aunado a los efectos de la poca dinámica de la actividad comercial, un lento proceso de diversificación productiva, el mercado local como el principal receptor de la producción, la ausencia de estrategias de mercadeo, la insuficiencia en la infraestructura vial, la caracterización de economías de enclave como las más dinámicas, ausencia de innovación en el sector productivo tradicional.
A la par, podemos señalar niveles incipientes de organización empresarial, la prevalencia de la intermediación comercial sobre la base de productos primarios de origen agrícola, la ausencia de conocimientos sobre comportamiento del mercado, entre otros posibles.
Una tendencia reciente, preocupante es la asociada con los niveles de ingreso y el desplazamiento de las actividades productivas autónomas con respecto a una mayor dependencia de los salarios. No obstante, es importante señalar el potencial para el desarrollo MIPYMES, así como la presencia de una cantidad muy importante de organizaciones sociales.
Finalmente, una población mayoritaria menor a los 50 años, incluyendo el segmento de población menor a los 20 años, 35,4% del total, 126.348 de un total de 356.519 habitantes de la región, en el 2014. En este marco referencial, la Sede Regional Brunca de la UNA sustenta su acción sustantiva, con el objeto de lograr un impacto medible en el tiempo.
(*) Decano Sede Regional Brunca