Harold Robinson, del Fondo de Población de las Naciones Unidas
“El racismo debe ser penado por ley”
Laura Ortiz C. /CAMPUSlortiz@una.cr
El pasado 23 de abril, la Universidad Nacional organizó el “Saludo al decenio internacional de los afrodescendientes”, donde la conferencia principal estuvo a cargo de Harold Robinson, del Fondo de Población de las Naciones Unidas. “El racismo es una de las manifestaciones más perversas de la sociedad, si bien la Declaración y el programa de acción de Durban nos da un marco de acción para el desarrollo de políticas políticas, el decenio nos permitirá abordar injusticas”.
Para Robinson, Costa Rica es un modelo de respeto hacia los derechos de los afrodescendientes. “Aquí no hay diferencias, por lo menos en términos de oportunidades, y estamos en una de las mejores situaciones con respecto al hemisferio en salud y educación; afirman que no responde a una política de afrodescendientes sino a un modelo de desarrollo, para mí la respuesta está en la igualdad, en el acceso a la educación, no solo por un país que se la ofreció a sus migrantes, sino porque ellos tomaron esa oportunidad, y por eso somos lo que somos hoy”.
El racismo es un crimen
Sin embargo, y de acuerdo con Robinson, Costa Rica sí se queda atrás en materia legislativa. “El sistema fue tan inclusivo que no hay promoción del racismo, pero sí hay individuos racistas: ese que grita de primero una ofensa en el estadio o escribe en las redes sociales, para ese debería haber un castigo penal, porque el racismo es un crimen y en esa materia países como Brasil nos llevan mucha ventaja, es parte de cambiar la cultura”.
Robinson destacó el comportamiento del país como sociedad. “Aquí no hay diferencia en las expresiones populares, no hay exclusión, pero debemos hacer ciudadanos tan tolerantes como lo es nuestra sociedad, y esto se logra haciendo que las manifestaciones individuales de racismo sean penadas por ley, porque no se puede practicar el racismo con impunidad”.
Para María Lourdes Sequeira, profesora emérita de la Universidad Federal de Bahía, Brasil, su reto como población afrodecendiente es otro. “Allá nosotros somo mayoría, y no tenemos problemas de discriminación o racismo, pero desde siempre, nuestro problema es no apreciar nuestra cultura, nuestras raíces, dejarlas de lado, no valorar eso que nos hace distintos y que aporta otra perspectiva para el mundo, nuestro aporte se invisibiliza si nosostros mismos somos los primeros en no reconocerlo”.
En esta actividad también participaron Sofía Solano del Instituto de Estudios Sociales de Población (Idespo-UNA) y Shirley Campbell, poetisa y activista cultural.