Sin Silencios
La vulnerabilidad institucional de las personas adolescentes hipoteca el futuro del país y sus jóvenes
José Carlos Chinchilla
Sin silencios tenemos que decir que las personas adolescentes del país están amenazadas por una subvaloración institucionalidad y también por una débil percepción social de la realidad vivencial de estas personas (edad 12 a 18-20 años). Un estudio reciente de la Clínica de Adolescentes del Hospital Nacional de Niños entrevista colegiales en los años 2013-2015 y revela información.
Sin silencio perfilamos aspectos del "mundo" de personas adolescentes: el 64% de quienes viven en zonas urbana y el 55% de zonas distantes del GAM (Puntarenas, Limón, Guanacaste) viven con ambos padres; un 22% con la madre "sola". Tienen un bajo conocimiento asertivo sobre la sexualidad, transmisión del SIDA, coito interrumpido, masturbación y días fértiles de la mujer. No obstante, una cuarta parte en zonas distantes del GAM y entre 16% y 19% quienes viven en GAM o San José han realizado prácticas coitales. Cerca del 50% han tenido acceso a la pornografía y en el caso de San José el 59%.
En lo relativo a la violencia, alrededor del 11% han sido víctimas, en San José un 5% de abuso sexual. Entre las personas adolescentes afectadas predomina el abuso emocional, el físico y el sexual en menor medida e identifican a padres (34% en San José, 6% fuera del GAM), otros familiares (37%-38%) como agresores. Entre el 11% y 6% porta armas y cerca del 7% y 3% las lleva al colegio.
El 38% ha fumado y el 58% ha tomado licor; entre el 11% y el 14% (GAM) utilizaron otras drogas; en el caso del licor sin diferencia significativa de género y en cuanto a otras drogas el hombre 59% y las mujeres 41%. El consumo tiende a iniciarse entre los 10 y 14 años; en cuanto a otras drogas a los 14 años y más.
Podemos agregar en el perfil malos hábitos alimenticios: más del 50% consume con frecuencia comida "chatarra"; solo el 22-23% hace ejercicio todos los días y entre el 12 y el 15% nunca. Entre un 13 y 31% ha tenido deseos de morirse en los últimos 30 días y entre el 8 y el 10% ha planeado morirse en los últimos 30 días.
Sin Silencios... ¡Esto no debe de ser! El sistema de salud estatal redujo de 100 a 10 las clínicas para atención de adolescentes. Este indicador expresa de manera sucinta y sumaria el abandono institucional de las personas adolescentes y la vulnerabilidad que hipoteca el futuro de estas personas y del país. ¿y las universidades?