|
La casa por la ventana Cleptocracia Carlos Francisco Monge 
Según sus necesidades y circunstancias, las sociedades humanas crean, abandonan, modifican o inventan palabras. Cleptocracia, por ejemplo, viene a significar, más o menos, el gobierno de quienes roban; dicho de más cruda manera: los ladrones al poder.La palabra democracia, en cambio, es tan antigua como la aspiración humana (más que doctrina política) a que a todos se nos reconozca en igualdad de condiciones ante el derecho, ante los recursos materiales y ante el poder. Un político costarricense, hoy expresidente, inventó para su campaña electoral y para su gestión de gobierno el vocablo «meritocracia». Buen anzuelo publicitario que apenas le valió de algo. Como se ve, con el sufijo -cracia se pueden crear diccionarios enteros, con tal de estar en condiciones de entendernos en nuestra vida civil: aristocracia, dedocracia, burocracia, plutocracia, ...futbolcracia. La cleptocracia, sin embargo, no es solo una útil palabra. Hoy día, en nuestro entorno, es un espectro muy real y una enfermedad al parecer contagiosa. En un informe reciente, la organización Transparencia Internacional publicó una lista de los diez gobernantes más corruptos de las últimas tres décadas. En ella figuran el haitiano Jean-Claude Duvalier, el indonesio Suharto, el zaireño Mobutu Sese Seko y —cómo no— varios hispanoamericanos; entre ellos el peruano Fujimori (que robó de su país 600 millones de dólares) y el nicaragüense Alemán, que del erario público desvió para su bolsillo personal 100 millones de dólares. Lo bueno, dice TI, es que algo se ha avanzado frente a la impunidad, como lo muestra la condena y encarcelamiento de Alemán en una celda común en nuestro vecino país. Pero la más abyecta forma de cleptocracia es la que padecemos en estos nuestros días. Me refiero al robo de nuestra confianza en un sistema político que creíamos inmune e infalible. Ya no confiamos en presidentes ejecutivos, en directores bancarios, en diputados o exdiputados, en exjueces, y hasta en la designación de un Contralor general. El poder político nos ha robado a los ciudadanos de a pie la voluntad de creerle; nos ha vuelto escépticos y tal vez paranoicos ante la corrupción y ante una democracia desfalcada. Eso es la cleptocracia. |
|
|
Oficina de Comunicación | Visión Crítica | Galería Fotografías | Correo Electrónico Hoy en el Campus | UNA | Ediciones Anteriores | Buscar CAMPUS Julio 2004 - Año XVI N° 148 Oficina de Comunicación, Universidad Nacional. Apartado 86-3000, Heredia - Costa Rica. Teléfonos (506) 237-5929 y 277-3224, FAX: (506) 237-5929. Correo electrónico: campus@una.ac.cr edición digital: www.una.ac.cr/campus Directora: Maribelle Quirós Jara. Editor: Victor J. Barrantes Periodistas: Gloria Muñoz Gracía, Laura Ortiz, Maribelle Quirós Jara, Oscar MI. Lépiz Villegas, Victor J. Barrantes, Silvia Monturiol Fernández, Xinia Molina Ruiz , y Asistente editorial: Ana Lucía Vargas. Diseño de página: José Luis Sánchez Pino josesanchez@engineer.com © Prohibido reproducir, transmitir o distribuir parcial o totalmente los artículos, fotografías, diseño o cualquier otro elemento del contenido que aparece en CAMPUS Digital. Si desea hacerlo enviénos su solicitud a campus@una.ac.cr |
