Jugando con números
- Museo itinerante de ciencias y matemática.
- Proyecto estimula el autoaprendizaje.
Gerardo Zamora Bolaños / CAMPUS
gzamorab@una.cr
Este museo viajero es montado y desmontado según las necesidades, y tiene capacidad para recibir hasta 30 personas a la vez. |
Un niño intenta colocar bloques rectangulares de madera dentro de una caja. Debe hacerlo de tal manera que todos quepan perfectamente. Otro trata de formar la letra L con 4 piezas, y uno más arma un rompecabezas geométrico. Son retos en los que los participantes aprenden jugando. Es el Museo de Ciencias y Matemáticas (MUCYM), una iniciativa itinerante que está revolucionando la forma en la que nos acercamos al mundo de los números, una manera creativa de explorar conceptos matemáticos y potenciar habilidades científicas.
Escuelas, colegios, comunidades, son algunos de los destinos del MUCYM. Las más de 15 actividades que componen el museo son portátiles, lo que facilita su traslado: “la respuesta de los estudiantes o gente adulta ha sido muy positiva, les llama la atención, se entretienen y aprenden, resolviendo situaciones y juegos que tienen un trasfondo matemático y poniendo a prueba sus destrezas e inventiva. Nos pasó, por ejemplo, en el Liceo de Pavas, en el Colegio de San José de la Montaña y en el Samuel Sáenz de Heredia, que los chicos incluso habiendo pasado por el museo varios minutos, luego regresan para seguir descifrado algunos otros desafíos”, comentó Leonel Chaves, coordinador del MUCYM y académico de la Escuela de Matemática de la Universidad Nacional (UNA).
Según sus gestores, el MUCYM se desarrolla bajo la metáfora piensa con las manos: “son desafíos que involucran el pensamiento matemático; en MUCYM no le damos respuestas a la gente, es la misma persona quien las descubre a través del juego, poniendo a prueba su capacidad de análisis, su creactividad, su destreza lógica-matemática. Lo que buscamos es fortalecer la apropiación social de la matemática y el aprendizaje continuo, entendiendo los valores implícitos en el aprendizaje humano, guiado por el principio experimental, que sostiene que las personas aprenden gracias a la experiencia directa y corporal, construyendo y haciendo”, explica Margoth Martínez, académica de esa misma escuela.
De esta manera, MUCYM utiliza “una pedagogía de experiencia y empoderamiento, lo que significa que el aprendizaje está en las manos de los aprendices, sus cuerpos y mentes se unifican. Los materiales y las actividades en exhibición están diseñados de manera atractiva y son acompañados de una mediación no intrusiva, requisitos y cualidades fundamentales para el aprendizaje mediante experiencias personales de empoderamiento”, concluyó Poveda.
En palabras de la Fundación para el Centro Nacional de la Ciencia y la Tecnología (Cientec), uno de los promotores del MUCYM, “el diseño completo, los efectos emocionales y de comportamiento propiciados por su estética, los espacios semiprivados y la pequeña escala del museo, los cómodos asientos para el control personal de los materiales de cada exhibición, todo tiene como propósito impulsar una pedagogía basada en ayudar a los aprendices a pensar por sí mismos, a través de materiales que acuerpan ideas y fenómenos básicos de ciencia, técnica y matemática”, así consta en su página web.
Este museo viajero es montado y desmontado según las necesidades, y tiene capacidad para recibir hasta 30 personas a la vez. “El diseño del espacio total del museo buscó una estética que afecta emotivamente a sus visitantes y estimula su comportamiento, posibilitando la interacción en pequeños grupos”, comentó Ricardo Poveda, académico de la Escuela de Matemática de la UNA.
Si usted tiene interés en contar con MUCYM en su centro educativo o comunidad, puede escribir al correo randall.hidalgo.mora@una.cr o bien a leonel.chaves.salas@una.cr También se dispone del teléfono 2562-6278.
MUCYM es una iniciativa de la Escuela de Matemática de la UNA, el Instituto Tecnológico de Costa Rica (TEC), la Universidad Estatal a Distancia (UNED) y la Fundación Cientec.